En mis rodillas

En lo profundo de mi rezo
Conseguí que la belleza
Se sentara en mis rodillas,
Y me susurro con sus ojos
Algunos de sus secretos,
Y yo le pregunté;
- Donde habitaba
- Donde se escondía
- Que buscaba, que anhelaba.
Y ella me respondió
Con su simpleza y absoluta mirada,
Y con su dulce y cálida sonrisa.

© Mario Tikvah


De pies cruzados (Barcelona) Mayo´06 © Mario Tikvah

De como conocí el amor

El cariño se apoderó de su rostro,
En cada línea de su cara, en su textura,
En cada una de sus difusas arrugas,
En su suavidad, en su calidez de terciopelo.
Allí lo conocí.
Y la ternura se alojó en sus manos,
En cada movimiento, en cada uno de sus dedos,
En las quebradas líneas de su mano,
En cada una de sus caricias indiscriminadas.
Allí lo conocí.
Y el valor, el coraje y la lucha se apoderaron
De cada una de sus piernas, cansadas ya de caminar,
De soportar lo baches del camino, pero
Orgullosas de todo su andado recorrido.
Y allí lo conocí.
Y la alegría se apoderó de su sonrisa,
Allí se encontraba, en su blanca boca, como blancas
Y brillantes perlas, y en sus rojizos labios hechizando
Con su permanente y desbordante sonrisa de vida.
Allí lo conocí.
Y por fin la esperanza se apoderó de sus ojos,
De sus grandes ojos, que con su mirada conducen
Hacia la ventana desde donde contemplar el mundo soñado.
Y por fin así lo conocí.

Gracias a ti mamá

© Mario Tikvah


Rostro (Madrid) Mayo´05 © Mario Tikvah

MI espejo TU rostro

Mi retrato es tu espejo
Mi rostro es tu rostro
Nada de ti me es ajeno, ni el dolor,
Ni la injusticia, ni la necesidad, ni tu libertad,
Ni tu caminar.
Mi retrato es tu espejo
Mi rostro es tu rostro
Tu corazón es mi motivo
Tu caminar mi intención
Tu rezo, mis anhelos y esperanzas.
Mi retrato es tu espejo
Mi rostro es tu rostro
Tus manos son mi voluntad
Mi cielo es tu espíritu, es tu inquietud.

2006 (San Pablo-Portoviejo-Ecuador)
© Mario Tikvah


La Espalda del Mundo, Javier Corcuera (Lima-Perú)

Invención

El extremo más débil y doloroso del ser humano, y el más enloquecido y ensoñado, poseen la misma autenticidad, la misma personalidad, la misma identidad genética. Y es de esta manera que se acercan poderosamente a las puertas del misterio vital.
Todo lo demás es una invención, una invención del ser humano, una pensada y razonada invención; una anestesia, una inercia maldita, una maquina controladora de hacer dioses malvados, hechos de falsas verdades.

© Mario Tikvah


Colección Las Manos O. Guayasamin (Pintura-> Quito-Ecuador)

Despedida

Otra despedida; y se vuelve a quebrar el corazón, y te tendré que buscar en los ojos de la infancia, en las montañas, en el viento de la tarde que suavemente sopla, en otros caminos, en otras fronteras, en otras formas,… y así nunca marcharás, así me perseguirás, así te llevaré, ese será tu renovado y precioso rostro, tu piel, tu mente, tu corazón y cada una de tus entrañas, con la eterna presencia de ti, con la olvidada despedida de ti.

2006 (Ecuador)
© Mario Tikvah


Manos en el aire (Barcelona) Junio´06